Jože Plečnik (1872-1957) |
La arquitectura
es sin duda alguna lo primero que notamos cuando visitamos un nuevo país o una
nueva ciudad. El conjunto de construcciones forman el aspecto general del lugar
que visitamos y constituye parte importante de la identidad de una localidad. Es
debido a esto que por lo general, lo primero que vemos hacer a un turista es tomarse
fotos junto a las obras arquitectónicas más relevantes, ellas de por sí solas
dicen mucho de la cultura y la historia del lugar que visitan.
Ljubljana no es
una excepción, miles de turistas acuden anualmente a fotografiar esta hermosa
ciudad, pues sus atracciones arquitectónicas son un orgullo nacional que vale
la pena contemplar. Gran parte de lo que es Ljubljana hoy en día se lo debemos
al arquitecto esloveno Jože Plečnik, quien es a menudo considerado
el arquitecto nacional de Eslovenia y es responsable de una gran cantidad de
obras maestras arquitectónicas dentro de Eslovenia, especialmente de la capital.
A Plečnik se le conocen tres etapas, una en Austria, donde diseñó la
Iglesia del Espíritu Santo en Viena, la primera iglesia de hormigón armado en
Europa, otra en República Checa, donde supervisó la renovación integral del
Castillo de Praga y la última y más conocida en Eslovenia, cuando en 1921 se
trasladó a Ljubljana, que convirtió en una capital moderna con planificación
urbana y proyectos arquitectónicos.
A continuación
algunas de sus obras más importantes:
El Puente Triple sobre el río de Ljubljana (Tromostvoje): es atravesado diariamente por miles de personas y fotografiado desde los ángulos más diversos, es una de las obras más famosas de este arquitecto y uno de los símbolos de la ciudad. Aunque ya existía desde 1842, fue Plečnik quien le dio la característica de puente triple, al diseñar dos puentes laterales para peatones para aminorar los efectos del tráfico diario.
El Puente Triple de Ljubjana |
El Mercado Central de Ljublana: se encuentra en la Plaza Vodnik y fue diseñado por Plečnik en los años treinta y construido entre 1940 y 1942. Fue concebido como un mercado de dos pisos siguiendo la curva del río e intersecta por una lado el Puente Triple y por el otro el Puente del Dragón. El lado del mercado que mira hacia el río tiene grandes ventanas semicirculares mientras que el lado que da a la calle es una columnata. Este mercado es hoy en día un monumento cultural de importancia nacional y un lugar para comprar y reunirse es un día de paseo
El Mercado Central de Ljubjana |
El cementerio Žale en Ljubljana: lo más imponente de este cementerio es sin duda alguna su entrada, una impactante esructura de monolito diseñada por Plečnik. Es un monumento arqueado hecho de columnas blancas con reminiscencia a los tiempos clásicos de antaño, su intención es representar la puerta entre la tierra de los vivos y la de los muertos. Es quizás por esto que el diseño resulta tan solemne y majestuoso.
La Biblioteca Nacional de Ljubljana: aunque en un principio su construcción presentó resistencia por parte de las autoridades yugoslavas ubicadas en Belgrado, gracias a protestas estudiantiles logró concretarse el proyecto y fue construida entre 1936 y 1941. Es quizás la creación más monumental de Plečnik, en tamaño y forma recrea un tribunal Ducal que antiguamente estaba en ese lugar pero que fue destruido en 1895 en un terremoto. Está hecho de paredes macizas con incrustaciones de ladrillo y bloques de piedra, a la vez que tiene ventanas por doquier, siendo de esta manera un edificio muy luminoso, pues su función tanto simbólica como práctica, fue para Plečnik, el de un lugar donde debía entrar la luz y el conocimiento. Este sincretismo de materiales resistentes y frágiles fue muy original en Ple-čnik.
La Biblioteca Nacional de Ljubljana |
La Corte Constitucional de la República de Eslovenia |
El Teatro Križanke: es un teatro al aire libre situado en el patio de un monasterio. Fue creado en los años cincuenta por Plečnik, quien remodeló el
monasterio para construir el teatro por orden de las autoridades de la época,
para celebrar el festival de verano de Ljubljana. Desde entonces el monasterio
vacío se transformó en un teatro y en sede de festivales de verano. Esta fue la
última gran contribución de Plečnik para su amada ciudad.
Es posible ver
la huella de Jože Plečnik en toda la ciudad, siendo estas solamente algunas de
sus creaciones más destacas. Lo cierto es que en cada esquina es posible
encontrar su genio; le dio a la ciudad un estilo personal, elegante, clásico y a la
vez moderno, aminorando la tendencia barroca que tenía hasta entonces, hasta el punto de transformar a Ljubljana en
una ciudad Moderna. El Teatro Križanke |
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